El Barça recuperó este martes el brillo en el José Zorrilla en un encuentro que dominó desde el inicio, con un planteamiento que se le atragantó al Real Valladolid, incapaz de frenar el juego de creación constante del cuadro catalán, en el que Leo Messi volvió a ser protagonista, junto a Pedri.
El equipo blanquivioleta, tal y como había comentado su técnico, Sergio González, la víspera del partido, salió con atrevimiento y descaro, dispuesto a sorprender a los jugadores rivales y, sobre todo, al trío de centrales que dispuso Koeman sobre el césped del Zorrilla, e impuso un ritmo intenso de juego.
Weissman realizó el primer disparo a puerta del choque en el minuto 6, que detuvo Ter Stegen y, si bien los vallisoletanos mantuvieron la presión, no hallaban opción de contragolpe, mientras que el Barça, acostumbrado a tener la posesión del balón, iba hallando acomodo y acercándose con mucho peligro al área local.